Los Arizonenses luchamos para recuperarnos de tiempos económicos difíciles. Ahora, depende de nosotros asegurar el futuro de Arizona con escuelas seguras y bien financiadas.
Hace solo unos años, las familias estaban sufriendo y Arizona tenía $ 1 billón de pérdida. Hoy en día, Arizona está creciendo y estamos invirtiendo en lo que más importa, como la educación K-12 y la seguridad pública.
Invertir en la salud, la seguridad y el éxito de nuestras escuelas es primordial para el éxito a largo plazo de nuestro Estado. Es por eso que Doug ha hecho de la seguridad escolar y el financiamiento escolar su enfoque principal.
Luego del trágico tiroteo en Parkland, Florida, Doug reunió a padres, estudiantes, maestros, oficiales de la ley, fiscales y expertos en salud mental para redactar el borrador del Plan de Escuelas Seguras de Arizona. Esta solución polifacética de sentido común coloca a más policías en los campus de Arizona, aumenta el número de consejeros escolares, crea una línea central para reportar problemas de seguridad y proporciona herramientas adicionales para evitar que las personas con problemas graves de salud mental posean un arma de fuego. Además, mejora el sistema de verificación de antecedentes mientras que protege nuestros derechos preservados en virtud de la Segunda Enmienda.
Doug cree que un sistema educativo de calidad K-12 es lo más importante que podemos hacer para garantizar que los niños de Arizona tengan un futuro fuerte y seguro. Su objetivo es aumentar nuestra inversión en educación pública y mejorar los resultados en el aula.
Es por eso que ha aumentado los fondos de educación cada año en el cargo, por un total de $ 2.7 billones, todo ello sin aumentar los impuestos. Esto incluye:
Siendo el primer estado en aprobar la Ley de educación cívica estadounidense, una nueva ley que exige que todos los estudiantes de secundaria pasen la misma prueba de educación cívica que cualquier ciudadano naturalizado debe aprobar para graduarse.
Doug quiere ver que más dólares vayan al aula y continúen aumentando los salarios de los maestros, al tiempo que invierte en otras prioridades claves, como educación profesional y técnica, y banda ancha de alta velocidad en nuestras escuelas rurales y tribales.
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